El dolor de estómago, o diarrea frecuente, puede ser la señal de una enfermedad inflamatoria intestinal (EII) crónica, que puede causar incapacidad funcional, pues daña el tracto gastrointestinal.

Dentro del grupo de enfermedades inflamatorias graves y crónicas,está la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa, que son dos de las más comunes, afectan principalmente a adultos y adolescentes entre 15 y 35 años de edad, independientemente del género.

Ocurren con mayor frecuencia en regiones desarrolladas como Estados Unidos y Europa; sin embargo, estas enfermedades han crecido entre tres a cuatro veces en varios países de Latinoamérica, incluyendo Argentina, Brasil, Chile y México, durante la última década.

Factores ambientales y la predisposición genética son algunas de las causas probables del aumento de las enfermedades inflamatorias intestinales en América Latina, según datos presentados durante la apertura en el II Congreso Pancco (Organización Panamericana de Crohn y Colitis).

“Las causas exactas aún no son totalmente conocidas, pero somos conscientes de que cuanto más desarrollada sea la región, mayor será la incidencia de EII. Éstas son enfermedades de los centros urbanos”, explicó Flavio Steinwurz, gastroenterólogo especializado en EII y secretario general de Pancco y Abrapreci (Asociación Brasileña para la Prevención del Cáncer Intestinal).

El experto también señalo que las EII como enfermedad de Crohn y colitis ulcerosa, son de difícil diagnóstico y tratamiento, porque generalmente la gente no va con el especialista. “La mayoría de los pacientes atribuye el dolor de estómago o diarrea frecuente a un virus o bacteria y para tratarlo, la mayoría se automedica, principalmente con remedios caseros”.

Po su parte, Jesús Yamamoto Furusho, presidente de Pancco, fundador y director de la Clínica de Enfermedad Inflamatoria Intestinal en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas “Salvador Zubirán”, aseveró que en la enfermedad de Crohn y Colitis Ulcerativa, fumar puede ser una de las causas que establece una predisposición a las EII, en particular en el caso de la enfermedad de Crohn.

“Somos conscientes de que los fumadores tienen el doble deriesgo de contraer la enfermedad de Crohn, en comparación con los no fumadores, y el riesgo persiste incluso después de dejar de fumar; sin embargo, los pacientes pueden presentar una mejoría en los signos de la enfermedad a solo un año de haber dejado de fumar”.

La enfermedad de Crohn generalmente afecta al extremo del intestino delgado (el íleon) y el comienzo del intestino grueso (colon), pero puede aparecer en cualquier parte del tractogastrointestinal desde la boca hasta el ano. Los síntomas comunes de la enfermedad son: dolor abdominal, pérdida de peso y, en algunos casos, sangrado rectal. Otros síntomas comunes son diarrea y fiebre. Los pacientes que sufren graves episodios de la enfermedad de Crohn presentan síntomas más agudos, como daño al tejido intestinal y abscesos (cavidades que acumulan pus, dando lugar a hinchazón e inflamación).

“Alrededor del 90% de los pacientes reportan un diagnóstico tardío, lo que significa que tardaron entre cinco y ocho años antes de ser diagnosticados con la enfermedad de Crohn, después de haber visitado a cinco médicos diferentes”, dijo Yamamoto.

“Cuanto más tiempo se tarda en hacer un diagnóstico y comenzar el tratamiento, más significativo es el impacto en la salud del paciente: esto aumenta el riesgo de cáncer, infección, recaída de la enfermedad y reduce la calidad de vida”, dijo.

La colitis ulcerativa afecta la sección interna del colon o recto, dando como resultado diarrea, dolor abdominal y sangrado rectal, que son síntomas similares a la enfermedad de Crohn. Generalmente, las personas son diagnosticadas con colitis ulcerativa alrededor de los 35 años de edad, aunque la enfermedad puede afectar en cualquier edad.

“Es importante que las personas que experimenten síntomas de EII consulten a un especialista para reducir la progresión, la cual puede derivar en una intervención quirúrgica, como una colostomía”, señaló el doctor Flavio Steinwurz.

En cuanto al tratamiento, el doctor Yamamoto asegura que se ha evolucionado mucho con la última generación de medicamentos, “la terapia más actual es la biológica, que va dirigida hacia diversas proteínas, la que tenemos disponible en México, se llama Factor de Necrosis Tumoral Alfa, esta terapia biológica en pacientes con Crohn y colitis ulcerosa va a bloquear de manera específica este tipo de proteína, permitiendo que disminuya el proceso inflamatorio a nivel del intestino y desaparezca la ulcera”.

De igual manera, comentó que la terapia biología ha venido a revolucionar el tratamiento de EII, ya que habrá menos hospitalizaciones y menos cirugías. “Pero sobre todo, mejora la calidad de vida de los pacientes y les permite hacer sus actividades cotidianas”, dijo.

Otro dato muy importante es que las enfermedades inflamatorias intestinales, tienen un impacto físico, social, psicológico, emocional y sexual, sobre todo en los jóvenes. De acuerdo con Mark Silverberg, profesor de medicina de la Universidad de Toronto Canadá, División de gastroenterología del Hospital Monte Sinai, “los pacientes no hablan de su enfermedad por temor y vergüenza; es muy importante dar apoyo psicológico y emocional a pacientes con EII, facilitando su acceso y adherencia al tratamiento médico y desarrollando su capacidad de enfrentarse a la enfermedad”.

También señaló que: “Si no se trata de manera adecuada estas enfermedades, muchos jóvenes tendrán que vivir en hospitales, pasar por varias cirugías, disminuyendo su calidad de vida”.

Afortunadamente las investigaciones para tratar éstas y otras enfermedades siguen. José Luís Cañadas Muñoz, director médico de Abbvie, comentó que tienen más de 150 estudios clínicos activos en todo el mundo para cuadros de origen inflamatorio. “Seis nuevos compuestos moleculares, nueve cuadros inflamatorios de origen inmunitarios en investigación, en más de 53 países, incluido México; ésta es nuestra misión, estar en la vanguardia científica para ofrecer alternativas terapéuticas innovadoras y eficaces”.

No se automedique, un dolor de estómago o diarreas constantes pueden ser una enfermedad inflamatoria intestinal; acuda con el gastroenterólogo ante cualquier síntoma, cuide su salud y la de su familia.